domingo, 16 de agosto de 2015

Inestable

Venis, me llenas de esperanza.  Es mi culpa.
Te vas, desapareces sin piedad. Me dejas sola junto a tu ausencia que se me aparece en todo lo que hago.
Apareces, de golpe y moves todo mi interior con un solo 'Hola'. Me desestabilizas. Te mostras vulnerable y despertas mi propia vulnerabilidad. 
Me podes de cualquier manera y forma. 
Te pido que te quedes. No lo haces. No podes.
Amo cada uno de tus defectos y me odio por ello.

M.C.